viernes, 26 de agosto de 2011

¿Para qué sirve una prueba de esfuerzo con gases?¿Es necesaria?



Daniel Senent, candidato reto Men´s Health 2011
Una prueba de esfuerzo, también llamada ergometría, es una medición de tu estado de forma y del comportamiento de tu corazón en todo el rango de esfuerzo. A diferencia de los electrocardiogramas convencionales, que se realizan en reposo, una parte de esta prueba consiste en realizar esta misma valoración pero empezando por el reposo absoluto y terminando por la capacidad máxima de esfuerzo, lo que aporta información crucial sobre el funcionamiento de nuestro corazón, pues un corazón que funcione correctamente en reposo puede no hacerlo a partir de un determinado nivel de esfuerzo.


Desde el punto de vista deportivo, y si se realiza con análisis de gases como podéis ver en la máscara de Daniel, la información que aporta lo es todo en la planificación de un entrenamiento de garantías. Yo siempre digo que es como si alguien te dijera que el destino se encuentra por ahí y estuvieras con las luces apagadas de manera que, bien puedes llegar dando tumbos o bien puedes perderte y nunca llegar, pues la prueba es como encender la luz y ver directamente donde está el destino al que nos dirigimos y trazar una línea perfectamente recta.

Esta prueba nos aporta datos muy relacionados con rendimientos atlético, como capacidad de producción de lactato y tolerancia a este, información fundamental si en nuestro deporte nos vamos a mover a intensidades máximas, pero también en aquellos casos en que solo busquemos estar en forma y perder algo de peso, pues nos va a revelar con total seguridad a qué intensidad debemos entrenar para maximizar el consumo de grasa y, en manos entendidas, incluso planificar entrenamientos a largo plazo gestionando ciclos de entrenamiento, periodización de estos, descanso necesario y, sobretodo, cuantificar nuestro estado de forma para poder compararlo con mediciones futuras.